martes, 2 de febrero de 2010

NO TE SALVES... Mario Benedetti


Una vez llegó a mis manos un libro de poemas de Mario Benedetti, con una dedicatoria donde hacían mención a este hermoso poema "No te salves..."
Por aquella época me encontraba en una disyuntiva sentimental, no tenía la experiencia de vida que tengo ahora (bah, tampoco es tanta...) ni había pasado tanta agua bajo el puente ...
Estaba en la plenitud de mi juventud, y asomándome al mundo luego de haberme dedicado de lleno a terminar con mucho esfuerzo mi carrera universitaria en el plazo que me había impuesto yo misma...
Sentía que estaba frente al "amor verdadero", y sobre mi persona pesaba el tomar una decisión en el momento en que estaba por concretar una unión de pareja...
Finalmente elegí uno de los caminos, por aquel entonces no sabía si era el acertado, pero en el nombre de una familia, sacrifiqué lo que consideraba "el verdadero amor"...
Hoy a la distancia, y después de haber sufrido las consecuencias de ese "amor prohibido o no", porque después de todo aprendí que nada es tan taxativo en esta vida, me doy cuenta que la única persona que se salvó (en forma egoísta) fue precisamente la que me regaló ese libro de poemas... (no en vano la dedicatoria estaba escrita en lápiz, por si alguien decidía borrarla... Poco jugado de su parte...)
A pesar de las consecuencias que produjo en mi vida esa relación, hoy en día puedo decir que no me equivoqué, que el camino no fue el errado...
Gracias a ello hoy disfruto de estas dos criaturitas maravillosas que son mis hijos, y si el camino por el cual transito es solitario, prefiero que sea de esta forma y no el tenerme que reprochar haber sido hipócrita...
Es increíble pero en esta vida todo es relativo, "lo que ayer fue hoy ya no lo es", y vuelve a mi mente la famosa frase de que "nada es para siempre..."
Espero que para ustedes este poema, que es tan hermoso, tenga otra connotación y otros recuerdos...
Se los dejo para que lo recuerden:
"No te quedes inmóvil
al borde del camino
no congeles el júbilo
no quieras con desgana
no te salves ahora
ni nunca
no te salves.
No te llenes de calma
no reserves del mundo
solo un rincón tranquilo
no dejes caer los párpados
pesados como juicios
no te quedes sin labios
no te duermas sin sueño
no te pienses sin sangre
no te juzgues sin tiempo.
Pero si
pese a todo
no puedes evitarlo
y congelas el júbilo
y quieres con desgana
y te salvas ahora
y te llenas de calma
y reservas del mundo
sólo un rincón tranquilo
y dejas caer los párpados
pesados como juicios
y te secas sin labios
y te duermes sin sueño
y te piensas sin sangre
y te juzgas sin tiempo
y te quedas inmóvil
al borde del camino
y te salvas
entonces
no te quedes conmigo.